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Prueba: Nissan Juke 1.5 dCi Tekna – Hasta arriba de equipamiento

El coche que hoy nos ocupa es, sin duda, uno de los pilares de Nissan. Es, tras el Qashqai, el modelo más vendido de la marca japonesa y todo un éxito de ventas a nivel general. El año pasado vendió 11,718 unidades, y en lo que va de año (meses completos contabilizados: enero y febrero) se han vendido ya 2,079 unidades; esta última cifra representa algo más de la cuarta parte de las ventas de Nissan en lo que llevamos de 2016. Y es que el Juke tiene atributos para ser un coche muy atractivo -tranquilos, nadie ha hablado aún de diseño-.

Nissan Juke Tekna_frontolateral_monte

Y es que el diseño del Juke tiene tantos seguidores como detractores. Es, probablemente, uno de los coches con más personalidad del mercado en cuanto a diseño y eso también tiene un precio: a mucha gente no le gusta; pero a otra mucha gente le encanta.

Una de las cosas que más me llamó la atención fue la cantidad de veces que gente no iniciada en esto de los coches me preguntó si el Juke era 3 puertas. El tirador de la puerta camuflado parece que cumple bien su cometido estético.

El Juke destaca por su musculada presencia, con unos pasos de rueda muy marcados y unas líneas que resaltan su anchura -a pesar de que esta, como veremos más adelante, es una cota normal-. El frontal es, sin duda, la parte más llamativa, con unos faros diurnos con tecnología LED y forma de media Z y unas luces de cruce (de xenón en nuestra unidad) enmarcadas en sendos faros circulares. Todo ello bajo la mirada atenta de una parrilla que recorre todo el ancho del frontal.

Nissan Juke Tekna_Vista lateral

La vista lateral está protagonizada por un abrupto, nada suave, ángulo entre el parabrisas y el techo que confiere al Nissan Juke un aspecto ‘cuadradote’. En la parte trasera, los pilotos se funden con el portón y la luneta, y por debajo queda el parachoques que se compone de la parte en color de la carrocería y una parrilla que simula el nido de abeja en plástico negro. El toque deportivo lo pone una salida de escape que, en nuestra unidad, viene cromada (y bien visible) de serie.

Tekna: sinónimo de completo equipamiento

La unidad protagonista de esta prueba era la versión de tracción delantera movida por el propulsor 1.5 dCi (Euro VI) de 110 CV y con la versión de equipamiento Tekna; esto es, la más dotada de cuantas componen la gama.

Con un precio de partida de 24,100 euros (21,200 con la oferta actual y la ayuda del Plan PIVE 8) para la versión Tekna, puede parecer, a priori, un precio algo elevado para un SUV pequeño que apenas supera los 4,13 metros de largo (4135 mm, exactamente).

Nissan Juke Tekna_detalle cámaras

Quizá empieza a cobrar sentido su precio cuando nos paramos a repasar su equipamiento: control de ángulo muerto, detector de movimiento, alerta de cambio de carril involuntario (a estos tres sistemas, Nissan los engloba en lo que llama ‘Escudo de protección inteligente’), luces automáticas con faros de xenón y limpiaparabrisas automáticos, reposacabezas activos, cámara de visión 360º, llave inteligente (no hace falta sacarla del bolsillo para abrir la puerta, y arrancamos el coche con botón), sistema de infoentretenimiento NissanConnect con pantalla táctil de 5,8”, navegador 3D y función Google™ Sento-to-car, asientos delanteros calefactados y tapicería de piel, retrovisores calefactados abatibles eléctricamente…

El Nissan Juke en su acabado Tekna viene con todo el equipamiento necesario para cumplir con nota en los apartados de confort, tecnología y seguridad

A todo esto hay que sumar las opciones que equipaba nuestra unidad: techo panorámico de cristal practicable (850€), pintura metalizada Blanco Perlado (470€), Pack Exterior negro (200€), llantas de 18″ personalizables (1,425€), juego de alfombras Luxury (61€) y la alfombra del maletero, opcional previo pago de 73 euros. Con todo, nuestro Nissan Juke se va hasta la nada desdeñable cifra de 27,000 euros (sin ofertas ni ayudas). Si bien el equipamiento opcional puede ser prescindible (vale, las llantas le quedan genial, pero a qué precio…), la dotación de serie es completísima y más que suficiente para satisfacer nuestras necesidades de confort y seguridad.

Nissan Juke Tekna_techo solar

Conviviendo con el Nissan Juke – ¿Cómo se comporta en cada ámbito?

La reducida longitud del Juke hace de él un coche que en la ciudad se desenvuelve como pez en el agua. Desde la posición de conducción veremos el capó, excepto si regulamos la banqueta del asiento en una posición baja, donde sólo veremos los extremos de los faros y, aunque las formas del coche pueden engañar al principio, pareciendo muy ancho, tardamos poco en acostumbrarnos y comprobar que, efectivamente, cabe por todos sitios. La postura de conducción es algo con que me peleé: me costó encontrar una postura cómoda (podemos regular la altura del asiento desde una posición poco más alta que en un turismo hasta una postura bien elevada), algo a lo que no ayuda que el volante no sea ajustable en profundidad. Eso sí, cuando encontré mi posición más confortable para conducir, iba realmente cómodo.

Nissan Juke Tekna_salpicadero e interior

‘Cómodo’ no es una palabra que dirán fácilmente los pasajeros que viajen en las plazas posteriores, no por culpa del mullido o el diseño de los asientos laterales, que no son en absoluto reprochables. Homologadas para 3 personas pero válidas en la realidad para solamente 2 (a no ser que sean niños), la anchura de las plazas traseras es estrecha y el espacio para las piernas, más bien justo, igual que la altura al techo (que se ve mermada por el techo solar opcional). Es ecuánime decir que esto no es nada que deba sorprendernos, teniendo en cuenta la longitud del Juke. Hay poco espacio porque el coche es pequeño; proporcionalmente, este apartado es correcto.

Nissan Juke Tekna_plazas traseras_2

A la hora de movernos con el Nissan Juke, el pilar A, junto con unos espejos retrovisores bastante grandes, quitan bastante visibilidad al afrontar un giro a izquierdas; si obviamos eso, la visibilidad lateral y hacia adelante son buenas. No así la visión hacia atrás, que de manera natural es pobre pero es un problema que se solventa en su totalidad gracias a los espejos retrovisores laterales (donde antes molestaban, aquí ayuda que sean grandes) y las cuatro cámaras incorporadas que permiten la visión de 360º.

Nissan Juke Tekna_cámaras

Las plazas traseras son aptas únicamente para 2 adultos. El maletero, con 354 litros, tiene un doble fondo que lo hace mucho más aprovechable

Entre nuestros trayectos por la urbe, en algunos iremos a hacer la compra con el Juke y aquí enseguida encontraremos que la boca de carga del Juke queda un poco alta. Dependiendo de nuestra altura y el peso de lo que vayamos a meter en el maletero, nos será más o menos molesto, pero en cualquier caso gustaría que fuese más baja y fácilmente accesible. Con 354 litros (el Juke anterior tenía 251), el maletero gana enteros gracias al doble fondo, en el que podemos separar cargas y aprovechar mucho mejor el maletero. Si lo queremos aprovechar más aún, podemos plegar los asientos traseros para crear un espacio de carga prácticamente plano de hasta 1,189 litros de capacidad.

Nissan Juke Tekna_asientos abatidos

Viajando por carretera con el navegador 3D como guía, en todo momento nos sentiremos con confianza ya que dicho sistema ofrece instrucciones precisas e información clara. Eso sí, no indica (en una de las esquinas de la pantalla, por ejemplo) el número de la salida que debemos tomar, cosa que siempre que viene bien para afianzar nuestra confianza.

En el apartado de ajustes y acabados, el Juke nada en el vasto mar de plásticos duros al igual que el resto de modelos de este segmento, aunque la sensación de calidad es buena. Sensación de calidad que aumenta en nuestra unidad gracias a los asientos acabados en piel (como también va forrada en piel la visera parasol del cuadro de relojes); visualmente, la versión Tekna trae de serie manetas de las puertas en aspecto cromado y los ajustes, en general, son más que correctos. Y digo ‘en general’ porque hubo un detalle que no me gustó, y que no sé si sea común a todos los Juke o era cosa de nuestra unidad, y es: en la parte superior del salpicadero sonaba un chirrido en cada giro pronunciado que tomábamos (en cada rotonda, por ejemplo).

Dinámica – ¿Qué tal se siente al volante?

En autovía, se siente con aplomo y goza de buena estabilidad. Aún en los estándares actuales de coche moderno, este Nissan Juke no da impresión de velocidad, incluso cuando dejamos de movernos a velocidades legales. Quizá influya en esto de manera notable la dirección y el buen aislamiento acústico.

Nissan Juke Tekna 1.5 dCi

El ruido del motor está bien aislado, y aunque los decibelios de la rodadura con estas llantas de 18 pulgadas y gomas de perfil bajo podrían ser elevados, no es el caso; y si lo fuese, seguiríamos escuchando los ruidos aerodinámicos, fruto de las formas de este coche. Un perfil con un parabrisas muy inclinado que casa con el techo con un ángulo nada suave y forma en pico hacen que el Juke no fluya a través del aire como un águila precisamente (Cx. 0,35). Además, el techo solar y el tamaño considerablemente grande de los retrovisores son dos alicientes más en el ruido aerodinámico. Pese a todo, el ruido aerodinámico no resulta molesto circulando, por ejemplo, a 130 Km/h por autopista, sobre todo si vamos escuchando música en el equipo de audio, el cual suena muy, muy bien.

En autopistas y autovías, el Juke saca su lado rutero y es capaz de recorrer kilómetros y kilómetros sin parar a repostar, pues a velocidad constante de 120 Km/h se llega a conformar con solo 4,7 litros cada 100 kilómetros.

El 1.5 dCi de 110 CV es suave, silencioso y se conforma con poco combustible. Además, en el modo Sport gana brío y estira con ganas hasta las 4,000 rpm

Impresionante es la cifra que se puede conseguir si circulamos por carreteras secundarias manteniendo la velocidad legal de forma constante (utilizando el control de crucero, que en nuestra unidad viene de serie): 3,6 litros cada 100 Km manteniendo un crucero de 100 km/h. Aunque la cifra más realista es superior a los 3,6 (y a los 3,7 litros que homologa), circulando por carreteras secundarias a velocidades legales, el Juke rara vez se irá por encima de 5 litros/100 Km. Sin duda, el 1.5 dCi es frugal; tiene poco apetito de combustible incluso si circulamos a ritmo alegre por carreteras de montaña.

Nissan Juke Tekna_lateral_sierra de fondo

Subiendo un puerto de los Montes de Toledo, donde llevamos al Juke a hacer algún ejercicio, en modo Sport y apurando las marchas, el ordenador de a bordo registró poco más de 7 litros/100 Km (7,1 para ser precisos). En este tramo, donde había parte con el asfalto roto y parte con el asfalto en buenas condiciones, el Juke se mostró relativamente ágil gracias a una batalla corta: cambia de trayectoria con facilidad aunque balancea notablemente y, en última instancia, el peso y la altura hacen mella e intentan sacar el coche fuera de la trayectoria de la curva.

La dirección, que en modo Sport varía la asistencia y gana algo de peso respecto a los modos Normal y Eco (en estos últimos, la dirección mantiene los mismos parámetros en ambos modos), no es comunicativa en ningún momento. En modo Sport se nota más directa y permite trazar las curvas girando menos el volante, lo cual es de agradecer en los giros más cerrados.

Y si bien la dirección no te habla en absoluto, el cambio te anima a ser su amigo: una palanca pequeña, de recorridos precisos y desarrollos cortos hacen que cambiar de marcha en el Juke sea un deleite. Con todo, se nos hará más fácil exprimir los 260 Nm de par -disponibles entre las 1,750 y las 2,500 rpm-, de los que se muestran en un display qué porcentaje estamos usando.

Nissan Juke Tekna_salpicadero_ Torque

Por su parte, los frenos tienen buena potencia de retención pero incluso mejor es el tacto del pedal: muy modulable y dosificable en todo su recorrido.

Aunque el Nissan Juke no tiene los atributos para conducción off-road, ni quiere tenerlos, su altura libre el suelo nos permitirá adentrarnos en pistas sin temer demasiado por los baches

El motor, que también puede variar su respuesta dependiendo del modo que seleccionemos entre Eco, Normal y Sport, destaca por su suavidad y buena respuesta en casi todas condiciones. En modo Eco, el motor está notablemente “capado” y la respuesta a nuestras demandas del acelerador se hacen más perezosas en pro de buscar el consumo más bajo. Tanto que, siendo extremadamente cuidadoso, conseguí lograr un consumo urbano ligeramente inferior al homologado (4,4 litros/100 Km frente a los 4,6 homologados). El consumo más realista por ciudad es, sin embargo, en torno a los 5,8 litros.

Nissan Juke Tekna_bache_zanja

En modo Normal, la respuesta del motor se muestra algo más receptiva a nuestras demandas, aunque sigue manteniendo la prudencia y a bajas vueltas es todavía algo perezoso. Es en modo Sport donde el 1.5 dCi de origen Renault cambia de carácter y responde inmediatamente al pedal derecho, con más brío y ganas de empujar hasta las 4,000 rpm (aunque no sea necesario estirar tanto, ni siquiera en una conducción alegre por carreteras de montaña); una vitalidad que contrasta con el modo Eco (lógico, por otra parte), donde el motor parece no querer subir más allá de 3,000 rpm, a donde le cuesta mucho más subir que en el modo más ‘deportivo’. Por tanto, si queremos cierta alegría, el modo a elegir es el Sport; a cambio, el consumo será algo más elevado pero, ¿a quién le importa que consuma un poco más de gasóleo si a cambio nos dibuja una sonrisa?

La suspensión, por su parte, tiende a seca; se notan mucho las irregularidades del firme y si circulamos por asfalto roto, el Juke puede resultar algo incómodo, cosa a la que no ayudan las llantas de 18 pulgadas y neumáticos de perfil bajo. Eso sí, por ciudad no será incómoda en ningún momento, ni siquiera cuando tengamos que salvar badenes incómodos por naturaleza propia.

Y aunque su hábitat natural es el asfalto, ya sea por ciudad o por carretera, podemos adentrarnos en pistas off-road sin mayor preocupación por los baches que el perfil de las llantas de nuestra unidad. Equipado con tracción 4×2, el campo no es su lugar pero la altura libre al suelo y unos ángulos decentes nos permitirán incursiones por pistas de tierra.

Conclusiones

En un mercado con claro protagonismo de los SUV, el Juke tiene muchos y muy duros potenciales rivales, entre los que se encuentran, entre otros, el Opel Mokka, Renault Captur, Peugeot 2008, Fiat 500X, Jeep Renegade, Mitsubishi ASX, Citroën C4 Cactus, Ford EcoSport, Suzuki Vitara o Mini Cooper Countryman, todos ellos duros contendientes que ofrecen en su mayoría un buen producto por un precio relativamente ajustado. El 2008 equivalente a nuestro 1.5 dCi (1.6 BlueHDI de 120 CV) es algo más caro que el Nissan pero es algo más rápido; el C4 Cactus, con 99 CV, ofrece unas prestaciones más pobres, mientras que el Jeep es el que ofrece mejores aptitudes off-road.

Nissan Juke Tekna_trasera_carretera sierra

Sin duda, el Nissan Juke tiene muchos y muy válidos argumentos que le confieren merecidamente su condición de super ventas: luce un diseño con mucha personalidad, tiene un motor suave y con poco apetito de combustible, ofrece una amplísima dotación de serie en esta versión Tekna y en los apartados de habitabilidad y maletero, aunque las plazas traseras gozan de poco espacio sobre todo en anchura, no es mucho peor que la media de la competencia. Y, además de todo lo anterior, ofrece una buena dinámica de conducción.

Sobre el Autor

Diego Gutiérrez

Aprendí a leer con los nombres de los coches que veía por la calle. A los 6 días de sacarme el carné, rompí un diésel atmosférico. Disfruto conduciendo cualquier cosa con motor y ruedas y en mis ratos libres estudio cosas ingenieriles.
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