No estás viendo el coche de un villano de una pelÃcula de terror, es el Citroën Mille Pattes Michelin. 9 toneladas, 7 metros de longitud y 2,45 metros de ancho. 10 ruedas.
Poco a poco después de la guerra, las prestaciones de los camiones iban en aumento asà como la carga que transportaban. MichelÃn que se impuso como uno de los lÃderes mundiales en el dominio del neumático se vio obligada a ponerse a trabajar para desarrollar neumáticos capaces de soportar las nuevas exigencias que estaban apareciendo.
A principios de los años 70 MichelÃn decide crear un laboratorio rodante con el que reproducir las condiciones de un camión en circulación en un entorno de seguridad óptimo, pudiendo someter a los neumáticos que diseñaban a velocidades superiores a los 120km/h sin ningún riesgo de accidente por un reventón, algo que podrÃa ser muy peligroso para un conductor de un camión de pruebas.
Nace asà el PLR MichelÃn, un Citroën DS monstruosamente modificado
Son los talleres MichelÃn los que se encargan de fabricar el PLR (Poids Lourd Rapide, camión rápido en francés) en 1972. (MichelÃn es propietaria de Citroën desde 1935). Se elabora un chasis rigido y sólido. Buscando una estabilidad óptima para este vehÃculo, se decide fabricar una máquina tan larga y tan ancha como un camión pero con el centro de gravedad mucho más bajo. Se elige el Citroën Break ID o DS, aunque se conserva más bien poco de él a la hora de la transformación.
Para hacer al monstruo controlable se le añaden 10 ruedas. 4 delante para la dirección y 6 detrás.
La suspensión, los frenos y la dirección son asistidos hidroneumáticamente.
Claramente el cuatro cilindros de Citroën no podrÃa mover tal monstruosidad. Buscando potencia y par motor se le montan dos V8 de Chevrolet, uno a cada lado. También se acopla un cambio automático de General Motors.
Sin embargo, para propulsar al PLR a 180 km/h basta con uno de los V8, el otro sirve para la función para la que se fabricó este vehÃculo, testar ruedas de camión.
En la parte trasera del Milles Pattes está el laboratorio de pruebas. Una rueda equipada con un neumático prototipo, es instalada en un brazo de suspensión y acoplada al segundo motor con una transmisión. Desde el habitáculo, mediante control remoto, se accionaba el brazo para hacer bajar la rueda hasta ponerla en contacto con el asfalto. Se podÃa ejercer mayor o menor presión con el brazo para simular la carga y mediante un par cónico se frenaba o aceleraba la rueda para cumplir con las directrices del test. Se llegaron a alcanzar velocidades de 155km/h en los test realizados.
Dos personas se ocupaban del funcionamiento, mientras una conducÃa, la otra se encargaba de la cabina de ensayo.
Todo el conjunto iba completamente carenado para evitar proyecciones de restos en caso de reventón durante la prueba.
Rafa Rivera
A décimas de segundo de ser Ingeniero Aeroespacial. Nacà en Córdoba y me crié entre un Escort y un Fiesta SuperSport. Enfadado con el mundo desde que en mi casa se compró un Ford Ka. Mi cabeza es una base de datos de coches, y solo coches, en constante actualización y estoy aquà para compartirla contigo.me encanta el ingenio francés, concretamente el de Citroen. pena que con los años se haya ido perdiendo, también, en parte, debido a la ignorancia del público general, que no sabe apreciar sus cualidades.
PD: si ya un DS es grande, este debe ser espectacular de ver.
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